
Novak Djokovic se despide de Roland Garros tras su derrota ante Jannik Sinner. Reuters Reuters 34g21
La nueva generación del tenis mundial aboca a Djokovic a un 'Last Dance': Wimbledon, vital en su búsqueda del 25º grande 544514
A pesar de su buen nivel en Roland Garros, el serbio, de 38 años, ve cada vez más complicado volver a reinar en un Grand Slam por la imparable evolución de los jóvenes liderados por Sinner y Alcaraz. 1j3o
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Nadie quiere dejar atrás las épocas gloriosas, pero tarde o temprano el paso del tiempo obliga a ceder el testigo a otros. Es ley de vida y del deporte. Con Roger Federer y Rafa Nadal ya retirados, las dudas sobre el futuro de Novak Djokovic comienzan a crecer.
Hasta ahora, su resistencia al declive es heroica, pero 2025 no está siendo su año y la la nueva generación del tenis mundial encabezada por Carlos Alcaraz y Jannik Sinner ha derribado la puerta. Ya no son next generation, sino presente.
Después de la derrota ante Sinner en semifinales de Roland Garros, Nole soltó la bomba: "Puede haber sido mi último partido en esta pista. Creo que Wimbledon es donde tengo más opciones de volver a ganar un Grand Slam".
Con 38 años recién cumplidos, todavía hay retos pendientes para Djokovic. Pero no es fácil mantener la motivación cuando tus rivales generacionales ya se han retirado y tus oponentes actuales son 15 años más jóvenes.
El gran deseo de Nole es cerrar su vitrina de grandes con, al menos, el Grand Slam número 25. El objetivo nunca ha sido fácil, y cada vez parece más complicado.
Aunque lidera el ranking histórico de los grandes masculinos, está empatado a 24 con la australiana Margaret Court. A uno del olimpo en solitario.
Legend. #RolandGarros pic.twitter.com/YtlMVCxpzJ
— Roland-Garros (@rolandgarros) June 6, 2025
El último Grand Slam para Nole fue el US Open de 2023, hace 636 días. Demasiado para alguien acostumbrado a ganar uno, dos o tres cada año.
Desde entonces, en 2024 cayó en semifinales del Open de Australia, cuartos de final de Roland Garros, perdió la final de Wimbledon y cayó con estrépito en tercera ronda del US Open.
Y este año, se vio obligado a retirarse en semifinales del Open de Australia y realizó un gran torneo de Roland Garros hasta que se topó con Sinner, también en semis.
🎙️ "Jannik showed why he's No.1 in the world"
— Roland-Garros (@rolandgarros) June 6, 2025
Novak Djokovic congratulated Sinner on reaching the #RolandGarros final and expressed his gratitude to the crowd for their tonight. 🎾👏 pic.twitter.com/5YcwdCnEtt
Sus resultados son buenos y sería ventajista decir que no está en la pelea por los títulos, pero lo que merma sus opciones no es tanto su declive como el auge de sus rivales.
Desde el último Grand Slam conquistado por Djokovic, Sinner y Alcaraz han ganado los cinco que se han disputado y este domingo se enfrentarán por el sexto.
Un seis de seis que demuestra el soro de la next generation liderada por dos colosos del tenis llamados a hacer historia.
En 2024, el italiano se impuso en el Open de Australia y en el US Open, mientras Alcaraz hizo lo propio en Roland Garros y Wimbledon.
Y este año, Sinner continúa con su racha triunfal. Comenzó el año con su segundo Open de Australia y tras alcanzar la final de París suma 20 victorias seguidas en Grand Slam. Si vence a Alcaraz, el número uno sumaría su tercer grande seguido.

Djokovic felicita a Sinner por su victoria en las semifinales de Roland Garros. Reuters
Último baile en Wimbledon 6q4j3c
En el horizonte, quizás, un último baile en Wimbledon. El siete veces campeón sobre la hierba londinense itía ayer que allí es donde más opciones tiene de ganar, aunque en las dos últimas ediciones cayó en la final contra Alcaraz.
Sus opciones aumentan dado su buen nivel en Roland Garros, sobre todo gracias a su exhibición en cuartos de final ante Zverev.
Pero 2025 no está siendo una buena temporada para Djokovic. Fuera del título número 100 conquistado en el torneo de Ginebra, está siendo su año menos prolífico.
El año de Djokovic empezó con sabor agridulce en el Open de Australia. El serbio se impuso a Alcaraz en su torneo fetiche, pero se vio obligado a retirarse en semifinales por lesión.
A partir de ahí, su balance en tierra batida fue muy negativo. Fue rápidamente eliminado en Doha, Indian Wells, Montecarlo o Madrid. Y en Roma, ni siquiera participó.

Djokovic se despide de Roland Garros.
Lo único que parece motivarle ya son los grandes, ya que en la temporada de hierba, tampoco aparece apuntado a ningún título preparatorio.
Con el nivel de Sinner y Alcaraz al alza, cada vez cuesta más pensar en Djokovic como favorito, y claro, la sombra de la retirada aparece en el horizonte.
Poner fin a su carrera tras 24 Grand Slams sería cerrar el episodio más lustroso de la historia del tenis. Con Roger Federer retirado a los 41 y Rafa Nadal a los 38, su fin es el fin de la edad dorada de la raqueta.
Otros gigantes del deporte como Valentino Rossi alargaron su carrera hasta los 42. Por ahí siguen LeBron James o Cristiano Ronaldo con 40, o Leo Messi, con 37.
Pero lo cierto es que todos ellos apuran o han apurado los últimos sorbos de carrera alejados del favoritismo y de la élite que Djokovic se resiste a abandonar a los 38.
Récords pendientes 293k3u
Con su triunfo en el torneo de Ginebra, el serbio se convirtió en el tercer jugador de la historia que supera el centenar de trofeos en la era abierta.
Jimmy Connors (109) y Roger Federer (103) parecían inalcanzables, pero Djokovic ya los tiene a tiro para lanzarse a por el reto de reinar también en este apartado.
Más difícil tendrá superar a sus dos rivales en la lucha por convertirse en el tenista con más victorias en la historia de la era abierta.
Connors lidera este apartado con 1.274 victorias, seguido por las 1.251 de Roger Federer.

Djokovic levanta el torneo de Ginebra y alcanza el centenar de títulos en la era abierta. Reuters
Djokovic acumula 1.140, aunque su porcentaje de victoria (83,2%) es superior al del suizo (81,8%) y el del estadounidense (81,8%).
Otro de los retos que parecían imposibles antes de su llegada al tenis pasaba por ganar todos los Masters 1000. Djokovic lo ha hecho, y además, en dos (y tres) ocasiones cada uno.
Aunque parezca increíble, el serbio tiene la oportunidad de retirarse habiendo ganado todos ellos ya no en dos, sino en tres ocasiones. Montecarlo es el único que se le resiste.