Soy gerente de una estación de ITV y os enseño un fallo muy común en la revisión del coche: "Muy poca gente lo sabe"

Pedro Bastida, conocido divulgador en redes sociales, ha compartido en uno de sus vídeos una advertencia clara y poco conocida por muchos conductores: un fallo aparentemente menor en los neumáticos puede suponer un rechazo en la ITV.

En su estilo habitual, directo y pedagógico, Bastida analiza un caso real y ejemplifica cómo una discrepancia entre códigos de velocidad puede convertirse en un defecto grave.

"Mira gente, un fallo de neumáticos por el cual te rechazan en la ITV", comienza diciendo Bastida, mientras enfoca con la cámara el neumático delantero izquierdo de un coche.

El neumático en cuestión es de medidas 205/55 R16 91V. Bastida enfatiza que la letra "V", que aparece al final del código, es clave: se trata del índice de velocidad, un dato que muchos pasan por alto pero que tiene una importancia técnica y normativa fundamental.

A continuación, se traslada al neumático derecho del mismo eje delantero, donde detecta una diferencia: el código es 205/55 R16 91W.

Las medidas coinciden en tamaño, carga e incluso en tipo de llanta, pero el índice de velocidad es distinto. Bastida lo deja claro: "esto es defecto grave".

Según la normativa vigente en España, todos los neumáticos montados en un mismo eje deben ser idénticos en cuanto a dimensiones, categoría de velocidad e índice de carga.

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Aunque pueda parecer una diferencia mínima, pasar de un código V (que permite velocidades de hasta 240 km/h) a uno W (hasta 270 km/h), la ITV no lo considera una simple irregularidad.

De hecho, se clasifica como un defecto grave, lo que implica el rechazo inmediato del vehículo hasta que se subsane el problema.

Bastida insiste en que muchos conductores desconocen este aspecto técnico. "La mayoría de clientes no conoce o no entiende este defecto", afirma, refiriéndose a la extendida creencia de que basta con que los neumáticos estén en buen estado visual para pasar la ITV.

Para reforzar su explicación, Pedro Bastida se traslada al eje trasero del vehículo y muestra que, en este caso, ambos neumáticos comparten el mismo código: 205/55 R16 91W. "Aquí sí coinciden, son los mismos", concluye satisfecho.

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Este vídeo pone de manifiesto la importancia de conocer los códigos de los neumáticos, no solo por cuestiones de seguridad, sino también por exigencias legales.

En definitiva, Pedro Bastida lanza un mensaje claro a sus seguidores: revisar no solo el estado físico de los neumáticos, sino también los códigos que los identifican.

Su advertencia no es un mero consejo: es una llamada a la responsabilidad técnica que puede evitar sorpresas desagradables en la ITV.