Ni pulpo ni mejillones ni ostras: esta es la tapa de marisco que no te puedes perder si viajas a las Rías Baixas 1n5q5k

¿Quién no sueña desde hace semanas con las vacaciones? ¿Quién no lleva días imaginando el sonido de las olas y el frescor de la brisa marina en una terraza junto a la playa?

Las Rías Baixas son cada vez más elegidas por los españoles que "huyen" de las altas temperaturas para pasar unos días de descanso disfrutando del clima y la gastronomía atlántica.

La costa del suroeste gallego es una de las zonas más bellas de España y también de las más ricas en biodiversidad.

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Las rías de Vigo, Pontevedra, Arousa y Muros-Noia se caracterizan por sus aguas tranquilas con kilométricas playas de arena blanca y un paisaje de viñedos y bosques de pinos salpicados por bonitos pueblos marineros como Cangas o Combarro.

Este clima y esta morfología de costa tan peculiar son las razones por las que esta zona ofrece una impresionante variedad de pescados y mariscos, haciendo que las Rías Baixas sean un paraíso para cualquier amante de la buena mesa.

Estamos en la cuna del albariño, el vino blanco que mejor acompaña a los manjares que ofrece el mar. Con aroma frutal, no muy ácido y ligeramente salino debido a la proximidad de los viñedos al mar, es un vino fresco que es pura esencia gallega.

Para comer, pulpo, almejas, navajas, mejillones, centollos, percebes, ostras, zamburiñas o vieiras, preparados de forma sencilla para apreciar su sabor natural o cocinados en guisos y en empanadas son parte de la identidad de esta región española.

No todo es pulpo y almejas 46512t

Es posible que los mencionados más arriba sean los mariscos que el viajero busca cuando llega al sur de Galicia, pero en esa lista falta uno de los productos que más definen la cocina marinera de las Rías Baixas, los chocos de la ría.

Este cefalópodo, similar a la sepia, pero de menor tamaño, se captura en las tranquilas aguas de la ría de Vigo, donde la alta cantidad de nutrientes procedentes del río, hace que tengan una textura y un sabor espectaculares.

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La localidad de Redondela, a unos 10 kilómetros de la capital viguesa, es conocida como la "villa del choco" y en ella se encuentran varios locales como Casa Cándido, la Taberna O'Tranquilo o el Restaurante Lemos donde pueden degustarse.

Se pescan de forma artesanal con nasas, manteniendo viva una tradición que garantiza la sostenibilidad del recurso tan arraigado en la costa sur de Galicia.

Se cocinan de muchas formas, en empanadas, con arroz o a la plancha, pero la receta más popular es el guiso de chocos en su tinta, un plato típico de taberna marinera, humilde, sencillo y sabrosísimo.

Y, por si las vacaciones tardan o los planes son otros, a continuación, explicamos nuestra receta para prepararlos en casa.