El presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, conocía la existencia de una denuncia por agresión sexual al ya exconselleiro do Mar, Alfonso Villares, desde el pasado mes de febrero. Así lo ha confirmado este jueves en declaraciones a medios de comunicación tras el acto de toma de posesión de la nueva conselleira, Marta Villaverde.
El titular del Ejecutivo gallego ha explicado que fue el propio Villares quien le explicó la situación y que decidió prestar voluntariamente declaración en un primer momento.
"Me lo comenta cuando vuelve a Santiago y le digo que me mantenga informado de cualquier otra novedad. No vuelve a tener otra comunicación hasta que el viernes pasado recibimos en la Xunta de Galicia una comunicación del Tribunal Superior de Xustiza preguntando si esta persona, Villares, es aforada".
Es entonces, con ese pronunciamiento judicial, cuando el Gobierno gallego toma la decisión de que el entonces conselleiro do Mar renuncie a su cargo.
En su intervención previa durante la toma de posesión de Marta Villaverde como nueva conselleira, Alfonso Rueda declaró que le desea a Villares "toda la suerte del mundo" y que también espera "poder recuperarlo" para la vida política.
Preguntado por esto, el presidente gallego aclaró que confía "en la justicia. Contrariamente a lo que estamos viendo estos días no me escucharán criticar a jueces o decir que están actuando sesgadamente. Lo único que pido es la máxima celeridad para que esto se resuelva y logicamente será la justicia quien lo tenga que resolver".
Sobre el exconselleiro, ite que "ha trabajado estrechamente conmigo y con todo el equipo durante este tiempo. Ahora creo que toma la decisión adecuada, renuncia al aforamiento cuando conoce su imputación. Será enjuiciado por un juzgado ordinario. En estos momentos deseo lo mejor para él pero quien tiene que pronunciarse es la justicia".
En este mismo sentido, recalcó una vez más que el Gobierno gallego ha actuado en el momento del primer pronunciamiento judicial y "la consecuencia, que es la que ustedes saben, es la renuncia al aforamiento para ser juzgado como cualquier ciudadano normal".
"Simplemente lo que han hecho es su imputación para que pueda declarar en un juzgado acompañado de un abogado. Simplemente eso ha motivado su separación. Él mismo lo pidió y yo lo acepté. Creo que es lo correcto", añadió.