Moncloa pondrá por primera vez pinganillos en la cumbre de presidentes para que Pradales e Illa hablen en euskera y catalán 5b212r

Según ha podido confirmar este diario, el Ministerio de Política Territorial ha impulsado la medida a petición del lehendakari Imanol Pradales y del president de la Generalitat catalana, Salvador Illa.

Ambos presidentes podrán intervenir en euskera y en catalán, respectivamente, gracias a la instalación de pinganillos para todos los asistentes.

Se trata de una novedad simbólica, pero también política, que ha sido interpretada por fuentes autonómicas como "una concesión más de Moncloa a los partidos nacionalistas".

La decisión del Gobierno de Pedro Sánchez sorprendió a los Ejecutivos autonómicos con lengua cooficial, como Galicia, Baleares o la Comunidad Valenciana.

Ninguno había sido invitado a sumarse a esta fórmula, aunque lo cierto es que la noticia provocó más hilaridad que indignación entre los gobiernos del PP consultados por este diario.

"Será ridículo" 1g472d

Isabel Díaz Ayuso sí reaccionó a través de un portavoz: "La presidenta no usará pinganillo cuando antes de entrar en la reunión han hablado en español", apuntan desde la Comunidad de Madrid. "Otra tontería de Sánchez para destrozar la conferencia en la que va a quedar en ridículo".

Desde Baleares, el equipo de Marga Prohens también se pronunció, aunque con matices.

"Como siempre, el Gobierno utiliza la lengua como herramienta de confrontación y para desviar la atención de lo importante", explicaba un alto cargo balear. "La presidenta vive la realidad bilingüe de nuestras Islas con absoluta normalidad. Lo importante es el contenido de lo que dirá".

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Por su parte, fuentes de presidencia de la Generalitat Valenciana califican de "pintoresca" la propuesta.

"Es que ni se puede tomar en serio. Para eso ha quedado la conferencia de presidentes con Sánchez. Para la nada", apunta una fuente del entorno de Carlos Mazón. "En valenciano decimos: no n’hi ha trellat (no hay sentido común)".

"Papel en blanco" 473us

Por su parte, los equipos de Juanma Moreno (Andalucía), Fernando Clavijo (Canarias) o Alfonso Rueda (Galicia) evitaron hacer declaraciones sobre el uso de pinganillos, y se centraron en denunciar que, "a menos de 48 horas de la reunión", no conocían "ni el formato ni los documentos de trabajo".

Como ya ocurrió en la Conferencia de Santander de diciembre pasado, "cuando la carpeta de documentación sólo tenía un folio en blanco", recuerda el entorno de Moreno.

Según el Ejecutivo, los presidentes podrán intervenir en "las distintas lenguas oficiales que se hablan en los territorios de España", gracias a un sistema de traducción simultánea solicitado por Illa y Pradales.

La decisión marca un precedente, similar al impuesto en septiembre de 2023 en el Congreso de los Diputados. El uso de pinganillos en los plenos de la Cámara baja fue introducido para facilitar el pacto de investidura entre Sánchez con Junts y ERC, y aseguró la presidencia para Francina Armengol.

El entorno de Feijóo, que siempre se ha mostrado partidario del uso de las lenguas cooficiales "donde corresponde", como en Galicia o en la istración autonómica, ha sido siempre crítico con su uso en foros comunes nacionales. El PP evitó reaccionar oficialmente, y varios gobiernos señalan que la clave es "si vamos a poder hablar del fondo y ser escuchados".

"Seguimos sin saber si se va a votar nada, si Sánchez va a dar respuesta a nuestras demandas o si el formato volverá a ser un desfile de monólogos", lamenta un portavoz de Fernando López Miras (Murcia).

El Rey antes del pinganillo 334j5b

La Conferencia de Presidentes comenzará con la tradicional foto de familia con Felipe VI y los saludos protocolarios, de 9:00 a 10:00 horas. Después de despedir al Rey, llegará la declaración institucional de Sánchez e Illa. Y sólo ahí comenzará el uso de lenguas cooficiales.

A continuación, se celebrará el pleno de la reunión. Pero el Gobierno no ha aclarado aún si habrá respuestas del presidente a las intervenciones o si se elaborarán conclusiones conjuntas.

Feijóo añade la "corrupción moral y económica" que supone la amnistía como un argumento más para salir a la calle el 8-J

Este miércoles, Moncloa sólo envió a las comunidades un dossier de prensa con los horarios. Pero de documentos técnicos o debate real, nada.

El contexto político tampoco es ajeno a esta novedad. El PSOE intenta recuperar la iniciativa tras haber tenido que ceder en el orden del día, tras la petición de las 13 comunidades del PP.

Tal como adelantó EL ESPAÑOL, el Gobierno tuvo que aceptar los ocho puntos propuestos por los barones populares, tal como marca el Reglamento de la Conferencia y la amenaza de recurso ante el Tribunal Supremo.

En Génova, el equipo de Feijóo celebró haber "doblado el brazo" a Moncloa. "Sánchez no puede convertir la cumbre en un mitin", advirtió un alto cargo popular. "Queremos un diálogo real, no una sucesión de discursos estériles".

En el PP creen que, con esta puesta en escena en Barcelona, con pinganillos incluidos, Sánchez pretende "blanquear" sus pactos y los de Illa con el independentismo.

El escenario, además, será el Palacio de Pedralbes, símbolo del giro del PSOE desde la foto con Quim Torra de 2018 y el reconocimiento de un "conflicto político entre España y Cataluña".